Aceite macerado orgánico de hipérico

Precio normal € 14,90

Agricultura Orgánica

Certificado Orgánico

The french flag - Made in France - Elliotti

Hecho en Francia

Macerado oleoso de Hierba de San Juan orgánica (Hypericum perforatum) es una infusión botánica tradicional conocida por sus propiedades calmantes, restauradoras y suavizantes para la piel. Macerado en aceite de girasol orgánico, este aceite apoya la piel sensible, promueve la relajación y contribuye al bienestar general mediante su uso tópico.

Beneficios clave

Comodidad para piel sensible y seca
Ideal para piel seca, estresada o expuesta al sol, este aceite ayuda a aliviar el malestar, calmar la irritación y restaurar el equilibrio natural.

Soporta el tono y la textura de la piel
Con propiedades astringentes suaves, ayuda a mejorar la claridad de la piel, refinar la textura y promover una apariencia suave y saludable.

Profundamente relajante
Un elemento básico en los rituales de masaje y cuidado personal, ayuda a calmar los sentidos y aliviar la tensión, perfecto para usar al final del día.

Comodidad para Músculos y Articulaciones
Tradicionalmente utilizado para apoyar la flexibilidad y aliviar la tensión muscular, este aceite ofrece una suave sensación de calor durante el masaje.

Consejos de aplicación
  • Para el cuidado diario de la piel, masajea unas gotas sobre la piel limpia para nutrir las áreas secas o irritadas.
  • Para la relajación nocturna, úselo como aceite de masaje en los hombros, el cuello o la espalda. Mezcle con aceite esencial de Lavanda o Manzanilla para una experiencia profundamente relajante.
  • Para apoyar la recuperación de la piel, aplique después de la exposición al sol para calmar y confortar la piel.

Esta infusión es una adición versátil a tu rutina de bienestar, ofreciendo un apoyo suave y natural para la piel y el cuerpo.

Más información

Nombre INCI: Helianthus annuus seed oil*, extracto de Hypericum perforatum*

Nombre botánico: Hypericum perforatum
Parte de la planta: Cimas floridas

Proceso de producción: Maceración de flores frescas de hierba de San Juan orgánica en aceite de girasol orgánico y luego filtración.

Color: Marrón rojizo

Olor: Característico

Origen de la planta: Francia

Consejos de uso

1. Alivio de Irritaciones en la Piel
Aplica unas gotas de macerado de hierba de San Juan directamente en áreas de irritación, enrojecimiento o picazón leve para ayudar a calmar y suavizar la piel. Ideal para usar después de la exposición al sol o en piel sensible.

2. Quemaduras Menores o Calor de Primer Grado
Masajea suavemente una pequeña cantidad en las áreas afectadas por calor menor (como quemaduras solares o quemaduras leves) para enfriar y restaurar el confort de la piel.

3. Hidratante Diario para Piel Seca o Sensible
Úsalo como un hidratante diario ligero aplicando unas gotas en el rostro o cuerpo, especialmente en áreas propensas a la sequedad o sensibilidad. Ayuda a hidratar mientras mantiene el equilibrio de la piel.

4. Aceite de Masaje para Relajación
Mezcla el macerado de hierba de San Juan con aceites esenciales como lavanda o manzanilla para un masaje relajante antes de dormir. Aplica en la espalda, cuello o pies para calmar el cuerpo y la mente antes de dormir.

5. Bálsamo Post-Afeitado
Aplica unas gotas después de afeitarte para calmar la piel y reducir el enrojecimiento. Sus propiedades calmantes pueden ayudar a prevenir la irritación por el afeitado.

6. Cuidado de Estrías y Cicatrices
Masajea en áreas propensas a estrías o cicatrices menores para mejorar la elasticidad de la piel y promover una apariencia más suave con el tiempo.

7. Aceite de Baño Calmante
Añade 1 cucharada de macerado de hierba de San Juan a un baño tibio para un remojo calmante y suavizante de la piel. Ayuda a aliviar la tensión mientras hidrata la piel.

8. Cuidado Después del Sol
Mezcla con gel de aloe vera o aplica directamente en la piel expuesta al sol para enfriar y calmar después de pasar tiempo al sol. El macerado ayuda a aliviar el malestar y restaurar el equilibrio de humedad.

9. Base para Bálsamo Labial
Usa unas gotas en labios secos o agrietados para restaurar la humedad y el confort. También se puede añadir a recetas de bálsamo labial casero como aceite base.

10. Bálsamo de Primeros Auxilios
Mantén el macerado de hierba de San Juan a mano en un botiquín de primeros auxilios para usar en cortes menores, rasguños o picaduras de insectos. Aplica suavemente para ayudar a calmar y suavizar la piel irritada.

11. Mezcla para Relajación Muscular
Combina con aceites esenciales como mejorana, lavanda o jengibre, y úsalo como mezcla de masaje para músculos adoloridos o tensos. El macerado ayuda a proporcionar confort y flexibilidad después de la actividad física.

12. Rutina de Cuidado Nocturno de la Piel
Aplica unas gotas en tu rostro como parte de tu rutina de cuidado nocturno de la piel. Apoya la restauración y el equilibrio de la piel mientras duermes, dejando la piel calmada y nutrida por la mañana.

13. Cuidado de Uñas y Cutículas
Masajea unas gotas en tus cutículas y uñas para ayudar a nutrir y restaurar la flexibilidad de las uñas secas y quebradizas.

14. Tratamiento para el Cuero Cabelludo
Para un cuero cabelludo seco e irritado, masajea unas gotas en el cuero cabelludo antes de lavar tu cabello. Ayuda a calmar la irritación y mantener el confort del cuero cabelludo.

15. Bálsamo Curativo Casero
Combina con cera de abejas y aceites esenciales como lavanda o árbol de té para crear un bálsamo calmante para preocupaciones menores de la piel como parches secos, rasguños o irritación.

¿Qué tipos de piel pueden beneficiarse de este macerado de aceite?

1. Piel Sensible
El macerado de hierba de San Juan es ideal para piel sensible debido a sus efectos calmantes y antiinflamatorios. Ayuda a calmar el enrojecimiento, la irritación y las molestias menores de la piel sin ser agresivo o demasiado estimulante.

2. Piel Seca
El aceite proporciona hidratación y nutrición, siendo excelente para piel seca o deshidratada. Sus propiedades restauradoras ayudan a mejorar la función de barrera de la piel, reteniendo la humedad y suavizando parches ásperos o escamas.

3. Piel Madura o Envejecida
El macerado de hierba de San Juan puede apoyar la elasticidad y firmeza de la piel. Sus propiedades regenerativas pueden ayudar a mejorar la apariencia de líneas finas, cicatrices y estrías, promoviendo una piel más suave y flexible.

4. Piel Inflamada o Irritada
Para piel que enfrenta condiciones como quemaduras menores, picaduras de insectos o irritación post-exposición al sol, este macerado proporciona un efecto calmante. Ayuda a reducir la inflamación y apoya los procesos naturales de recuperación de la piel.

5. Piel Normal a Mixta
Incluso si tu piel está equilibrada, el macerado de hierba de San Juan puede usarse para el mantenimiento general. Su textura ligera se absorbe bien sin dejar residuos grasos, ayudando a mantener la salud y la hidratación general de la piel.

6. Piel Propensa al Acné
Aunque no es específicamente anti-acné, sus propiedades antiinflamatorias y astringentes pueden beneficiar a la piel propensa al acné al reducir el enrojecimiento y calmar las irritaciones sin obstruir los poros.

7. Piel Post-Trauma o Expuesta al Sol
Después de la exposición al sol o tras un trauma menor en la piel (rasguños o cortes), la hierba de San Juan puede ayudar a acelerar la recuperación y aliviar el malestar.

Tipo de piel
  • Piel envejecida
  • Madura
  • Sensible
  • Piel seca
  • Piel normal
  • Piel con imperfecciones
Problemas de piel y cabello
  • Manchas de edad
  • Moretones
  • Quemaduras
  • Dermatitis
  • Cabello y cuero cabelludo secos
  • Piel seca
  • Eczema
  • Piel escamosa
  • Pérdida de cabello
  • Picaduras y mordeduras de insectos
  • Picazón
  • Erupciones
  • Mejillas rojas
  • Cicatrices
  • Elasticidad de la piel
  • Piel quemada por el sol
  • Manchas solares
  • Estrías
  • Arrugas
  • Heridas y úlceras
Propiedades
  • Antiinflamatorio
  • Hidratante
  • Nutritivo
  • Astringente
  • Equilibrante
  • Protector
  • Regenerativo
  • Calmante
  • Acelera el cierre de heridas
  • Suavizante
  • Regeneración de tejidos
Nutrientes
  • Vitamina A
  • Vitamina E
  • Omega 6
  • Omega 9
  • Beta-caroteno
Composición

Ácidos grasos esenciales principales:
Ácido linoleico (C18:2): 3.5 a 21%
Ácido palmitoleico (C16:1): máx 3.5%
Ácido oleico (C18:1): 55 a 83%
Ácido palmítico (C16:0): 7.5 a 20%
Ácido esteárico (C18:0): 0.5 a 5%

Calidad

Calidad: Macerado oleoso, 100% natural, sin ningún tratamiento químico, calidad cosmética.

Cultivo: Orgánico. *100% de los ingredientes son de agricultura orgánica. Proceso de fabricación controlado. Certificado por Bureau Veritas según la referencia del estándar Cosmos disponible en el sitio web www.cosmos-standard.org

Densidad: 0.920

Potencial oxidativo: sensible a la oxidación. Almacenar en un lugar fresco, alejado del aire y la luz.

Certificación

- Certificado por Cosmebio Francia

- Producto 100% natural
Calidad cosmética

- No probado en animales

- Materias primas que cumplen con las normas ambientales

- Sin material petroquímico

- Propos Nature favorece a pequeños productores, artesanos y el comercio justo

- Garantía de fabricación en Francia

Un poco de historia

La Hierba de San Juan (Hypericum perforatum) tiene una rica historia que se remonta a miles de años, venerada en diversas culturas por sus propiedades curativas y espirituales.

Raíces Antiguas en la Medicina y el Mito

Medicina Griega y Romana: Los antiguos griegos y romanos fueron algunos de los primeros en documentar los usos medicinales de la Hierba de San Juan. Médicos griegos como Dioscórides la recomendaban para condiciones "nerviosas", heridas e incluso como protección contra los espíritus malignos.

Folclore Europeo: La planta obtuvo su nombre, "Hierba de San Juan", por su asociación con San Juan Bautista y tradicionalmente se cosechaba el 24 de junio, el día de la fiesta del santo. La gente creía que la flor tenía poderes protectores, manteniendo a raya a los espíritus malignos cuando se colgaba sobre las puertas o se usaba como amuleto.

Edad Media: Un Símbolo de Protección y Curación

Sanadores Medievales: Durante la Edad Media, la Hierba de San Juan se convirtió en un remedio destacado para heridas, quemaduras y condiciones de salud mental. Conocida como "Fuga Daemonum" (latín para "huida de demonios"), era utilizada por sanadores para calmar mentes perturbadas, probablemente debido a sus propiedades estimulantes.

Usos Espirituales: También se creía que expulsaba espíritus negativos, conectándola profundamente con prácticas místicas. El pigmento rojo de la planta, la hipericina, se pensaba que representaba la sangre de San Juan Bautista, lo que aumentaba su reputación como una hierba sagrada y protectora.

Renacimiento y Más Allá: Primeros Usos Herbolarios y Clínicos

Herbolaria Europea: En los siglos XVI y XVII, herbolarios como Paracelso reconocieron las propiedades calmantes de la Hierba de San Juan para la piel y su capacidad para ayudar con la melancolía, el nerviosismo y la inflamación. Los textos de este período muestran que se usaba como infusión, ungüento o tintura, sentando las bases para sus usos medicinales modernos.

América Colonial: Los colonos europeos llevaron la Hierba de San Juan a América del Norte, donde se adaptó bien y se convirtió en un remedio básico para los pioneros. Las tribus indígenas eventualmente adoptaron su uso, incorporándola en sus propias tradiciones herbolarias.

Reconocimiento y Investigación Moderna

Estudios del Siglo XX: El interés científico en la Hierba de San Juan aumentó en el siglo XX. Los investigadores identificaron compuestos como la hipericina y la hiperforina, que se cree que apoyan el estado de ánimo y el bienestar mental, así como las propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas y cicatrizantes de la planta.

Usos Actuales: Aunque todavía se valora por sus usos tradicionales en el cuidado de la piel, quemaduras menores e irritaciones, la Hierba de San Juan es ampliamente reconocida en la medicina holística por sus propiedades de apoyo al estado de ánimo. Sigue siendo un ingrediente clave en aceites, ungüentos y productos de bienestar, combinando la sabiduría de siglos con la investigación moderna.

Legado Simbólico y Botánico
Más allá de su papel medicinal, la Hierba de San Juan sigue siendo un símbolo de luz, protección y curación. Sus vibrantes flores amarillas simbolizan el sol y la fuerza, cualidades que a menudo se consideran inherentes en esta planta resistente y terapéutica.

Precauciones para el uso

Uso externo solamente.
No usar antes de la exposición al sol (riesgo de fotosensibilización)

Siempre realice una prueba de aplicación de su preparación en el pliegue del codo 24 horas antes de usar.

Consulte a un especialista para cualquier otra indicación.

Embalaje y almacenamiento

Almacenar en un lugar fresco, lejos del calor y la luz.

Almacenamiento (DLUO): 8 meses después de abrir

Embalaje: botella de vidrio ámbar (50ml)/plástico PET ámbar y tapa de servicio negra (100ml) reciclable y reutilizable

Etiqueta hecha de papel de bosques gestionados de manera sostenible (FSC)

Volumen

100ml